La señorita que me atendió cuando llegué, tiene muy mal trato con los clientes, varios amigos nos hospedamos ahí, llegamos a distintas horas y la misma persona de recepción los trató mal, posteriormente me atendió otra señorita mas delgada (“para no ofender a la otra que nos trató mal”) fue súper amable, comprensible y atenta.
Una sola queja que se puede comprender, salimos muy tarde la habitación y pedimos que la limpiaran porque pedimos servicio al cuarto, nos confirmaron que irían pero no fue así, había platos en el pasillo de otra habitación, duraron todo un día, hasta el otro día vi que los levantaron, creo que les falta personal, ya que nos llevaron toallas limpias el muchacho que estaba encargado de la seguridad.